No quiero vivir de rodillas,
sentarme en tu silla,
ni morir de pie.
No quiero un amor de escalera,
ser pez de pecera,
contagiarte de fe.
No quiero dormirme en tu falda,
que me des la espalda,
preguntar por qué.
No quiero volverme tan loco,
conformarme con poco,
intimar con la soledad.
No quiero quedarme en cobarde
pensar que ya es tarde,
actuar con frialdad.
No quiero que te vayas lejos
reclamar cotejos,
debatir sobre amistad.
Solo quiero que me dejes
que te quiera como quiero,
y luego nunca te alejes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario