Porque hay historias que merecen ser contadas...

Es hoy cuando decido aprovechar la bondad de internet para empezar a organizar una parte de mi vida. Alguien me comentó que había creado un blog para su mamá y lo vi como una buena alternativa de poner en orden un gusto que siempre tuve y nunca me animé a compartir masivamente, quizá porque en realidad no me considero bueno, sino simplemente un aficionado que encontró en la escritura una descarga, una terapia, y sobre todo una forma de no matar los recuerdos, porque a medida que pasa el tiempo, la memoria nos engaña.
No recuerdo cuando descubrí este gusto, pero fue hace mucho tiempo y gracias al amor por la enseñanza y la literatura de una profesora del secundario (Ana Machado), y porque algo merecía ser documentado de alguna manera, y para mi la palabra escrita es la mejor forma de trascender cualquier frontera, incluso cuando el tiempo, la vida, y la muerte nos condenan a un final anunciado. Porque sigo insistiendo en que hay cosas que son infinitas, y no todo termina cuando nos llega la hora, porque al límite de nuestra existencia lo determinamos nosotros mismos con lo cosechado en vida, y hay palabras que tienen miles de años y perduran gracias a que alguien las escribió en un papel, una piedra, una pared.
La literatura es un arte, y como todo arte es infinito. Muy lejos estoy yo de ser un artista, aunque en mi afán de escritor, alguna tuve la fantasía de que mucha gente llegara a leer lo que escribo con el mismo gusto con el que lo hago.
Soy desordenado por naturaleza, y en ese gran desorden perdí muchas cosas que escribí, nunca tuve un diario, bitácora, cuaderno, archivo, ni nada que conserve lo que fui escribiendo, y lamento haber perdido una parte de esos recuerdos que no merecen morir. Por eso es que decidí desde hoy recopilar mi material en un blog.
Porque internet es la herramienta mas usada del mundo, porque así voy a dejar perder lo que voy escribiendo, y porque quizá no cumpla ese sueño de que mucha gente lo lea, pero se que alguien lo va a leer y se va a encontrar entre mis recuerdos, y hasta quizá sonría de gusto.
Termino el prologo de mi blog con un GRACIAS a todas las personas que vayan a participar directa o indirectamente de él, porque cada día guarda mil historias que merecen ser contadas, y yo lo hago "por el gusto de escribir".

lunes, 27 de octubre de 2008

Lejos de casa

Viví una experiencia fantástica y extensa en el exterior... Fueron tres años en los que no paré de ver cosas nuevas y aprender muchísimo.
Una noche en República Dominicana, recibí en mi departamento a Matías, un cordobés que venía desde cuba a estar una semana en Punta Cana antes de regresar a Argentina. Un personaje de escasa estatura pero de una nobleza gigante. Fascinado por la experiencia que vivió en la isla de Fidel, me contagió toda esa fascinación contandome cada detalle se su viaje. Músico y artista, gran pianista, aventurero, y bohemio, se imaginarán su experiencia en La Habana. Una noche hablando de lo distinto que te hace ver las cosas el estilo de vida cubano y el régimen político, pusimos fin a la charla mirando "Habana Blues", exelente película que relata de una manera bastante objetiva lo que pasa allí.
Mati estaba a Punto de regresar a Argentina, y a mi ese día me invadió una nostalgia impresionante. LLovía, y desde mi ventana todo se veía triste. Y sentía un vacío que se llenaría sólo cuando regresara a mi lugar, con mis seres más queridos. Pero no era mi turno, y por momentos mi impotencia se transformaba en una fuerza que era capaz de animarse a salir corriendo locamente, subir a un bote, y empezar a remar rumbo al sur. Era un escenario ideal para deprimirse y llorar, y así lo hice. Unos minutos después, agarré un papel y escribí lo que pude. La extraña sensación y contradicción de estar a 10 mil kilómetros de casa, con ganas de volver; pero a su vez, el empuje a seguir viviendo mi experiencia, ogulloso de poder haber conseguido lo que estaba a mi alrrededor.
Y "Lejos" resultó de esa noche de nostalgia, cuando el sol me avisó que tenía que dormir.

LEJOS

En los hilos de la bandera
en la barrera de la frontera
que te animaste a cruzar,
quedaron tragos con los amigos,
quedó el abrazo que hace de abrigo
de unos viejos que no dejan de pensar.
Y en la ventana de un primer piso
ves como llueven gotas de aviso
a la lágrima, que no querías llorar.

Y no dejaste de sentir que en la distancia
están las fuerzas que endurecen la constancia
y ese sueño que te queda por vivir.

Leés mensajes recurrentes de madrugada,
el sol te encuentra consultando con la almohada
ese dilema de seguir o regresar.
El trabajo te bloquea el sentimiento,
nuevos amigos y tu vida un nuevo cuento,
pero nada te hace olvidar.
Algún proyecto ambicioso se hace real,
tu vida deja por momentos de ser normal
y a veces te invade la soledad.

La lejanía que hoy te separa de aquel abrazo
y esas ganas que te alejan de los fracasos
son las dos caras de la moneda de tu existir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hooola javii! Como andaas?
Paasoo! First in Post!
Muy buueno tu Blog.. ;)
Sueerte!
P.D.: soyy rodrii, tu priimo..